Espanyol derrotó 3-1 ayer jueves a Villarreal en el “RCDE Stadium” y se clasificó para los cuartos de final de la Copa del Rey, en un duelo que encarriló en la primera parte con dos goles de penal en cinco minutos.
Joan Francesc Ferrer, técnico de Espanyol prometió que iría por el partido desde el inicio, pese al 2-2 de la ida, y así fue. La intensidad del anfitrión, así como su presencia en el área contraria, fue mucho mayor en los primeros compases que la del Villareal.
El cuadro blanquiazul insistía más y se llevó el premio. En el minuto 32, Borja Iglesias cayó en el área tras ser derribado por Pepe Castaño y el árbitro señaló penal. Piatti se encargó de lanzarlo y marcó el 1-0.
Cuando el "RCDE Stadium" todavía estaba celebrando el primer gol, Gayún no permitió el avance de Puado y el colegiado marcó, de nuevo, una pena máxima. Fue entonces el turno de Borja, que hizo rugir a sus aficionados con el segundo tanto de penal.