Liga de Quito de Ecuador se consagró ayer, sábado, como nuevo campeón de la Copa Sudamericana tras vencer por 3-4 al brasileño Fortaleza luego de igualar 1-1 en los 120 minutos de juego.
Una impresionante actuación de Alexander Domínguez en la definición desde los doce pasos permitió que los dirigidos por Luis Zubeldía volvieran a conquistar un título que habían ganado en la temporada 2009.
El portero detuvo tres disparos y fue la gran figura del encuentro disputado en el estadio Domingo Burgueño Miguel de la ciudad uruguaya de Punta del Este.
En los 90 minutos, un golazo del argentino Lisandro Alzugaray mantuvo intactas las esperanzas de los ecuatorianos, que comenzaron abajo en el tanteador por el gol del también argentino Juan Martín Lucero.
En el comienzo, Fortaleza volcó su ataque hacia la derecha y apostó por el buen juego de Marinho para dificultar la labor de un lateral que siempre contó con el apoyo del centrocampista Jhojan Julio.
Del otro lado, Liga de Quito tuvo problemas para generar jugadas de peligro y eso llevó a que el atacante Paolo Guerrero debiera retroceder varios metros e incluso moverse hacia los costados del campo para recibir el balón.
Sobre los 17 minutos, Marinho aprovechó un error de su adversario en la mitad del campo para crear una de las mejores jugadas de la primera parte.
Pero tras dejar por el camino a dos rivales, el número 12 del equipo brasileño no pudo definir y Fortaleza dejó pasar su primera gran posibilidad.
Los ecuatorianos respondieron con una jugada de pelota quieta y un golpe de cabeza que se fue por arriba del horizontal. Se acercaron también con un disparo lejano de Julio que se fue afuera.
En el comienzo de la segunda parte el cero tardó apenas tres minutos en romperse.
El argentino Tomás Pochettino desbordó por la derecha, sirvió el balón al medio y Lucero se anticipó a su marcador para sacar un potente disparo que dejó sin opciones a Domínguez y se convirtió en el primer tanto del Fortaleza.