Desafío cumplido. Un año más, el exigente Circuito Oscar Crespo, con un trazado de 5,7 kilómetros, fue una prueba exigente para los pilotos locales, nacionales e internacionales. Un total de 96 binomios quedó a medio camino.
La plataforma mixta de asfalto y tierra, que cruza el centro de la ciudad, quebradas e incluso un riachuelo, volvió a hacerse sentir para los 227 motorizados que intervinieron en las dos jornadas de competencia.
Según los datos de los organizadores, de los 227 automóviles que largaron de la plaza 25 de Mayo, 96 no completaron los dos giros del tradicional circuito chuquisaqueño.
La mayoría se quedó en Yotala, ya sea en su primer o segundo giro al trazado. Otros lo hicieron antes de llegar a Totacoa y unos cuantos tuvieron desperfectos mecánicos entre Qhora Qhora y Khochis.
Ya sean pilotos novatos o veteranos en este circuito, el Oscar Crespo es el mismo para todos: implacable, desafiante y complicado, según comentaron varios de ellos.
Dentro de los debutantes estuvieron ocho binomios peruanos, de los cuales dos no completaron la prueba; mientras que dentro de los experimentados, quedaron en medio camino nombres de destacados como el chuquisaqueño Raúl Téllez, el tarijeño Melvin Budia, el cruceño Eduardo “Happy” Peredo y el paceño Rolando Castrillo, el más ganador del circuito con siete títulos.
Pero ya sea para subir al podio o simplemente para que les bajen la bandera a cuadros de la plaza 25 de Mayo, el terminar un Oscar Crespo es sinónimo de grandeza y respeto.
El domingo, en la segunda y última jornada de competencia, los que más celebraron el haber superado el desafío fueron los cruceños Roberto Saba (Rally 2) y Rafael Mendoza (Proto), el potosino Rolando Careaga Roncal (RC2N), el orureño Jairo Chura (R2B) y el cochabambino Jhonny Román (Senior), ganadores de sus respectivas categorías.