
Luis Suárez aportó una gran jugada para el primer tanto y anotó él mismo el segundo, en el partido que el Barcelona ganó ayer 2-0 al Alavés, con lo cual dejó la mesa puesta para celebrar el título de La Liga española, a cuatro fechas de la conclusión.
En un complicado duelo en que el conjunto local se había defendido con eficiencia, una genialidad de Suárez provocó que se abriera el marcador. El uruguayo permitió que un balón le pasara entre las piernas para que llegara a Carles Aleñá, quien anotó con un disparo dentro del área a los 54 minutos.
Seis minutos después, el propio Suárez amplió la ventaja al convertir un penal, sancionado por el videoarbitraje (VAR).
El Barza llegó a 80 puntos y prepara ya el festejo de su 26to título de liga (octavo en los últimos 11 torneos). Lo conseguirá si el Atlético de Madrid, que tiene 68 unidades, pierde en casa este miércoles ante el Valencia.