
Real Madrid se reencontró con el triunfo en el "Santiago Bernabéu", donde no vencía desde el 18 de marzo, en un premio excesivo ante los méritos de un combativo Leganés, que fue golpeado con crudeza en el primer acto con los tantos de Bale y Borja Mayoral y acarició el empate.
Era un trámite que debía superar Real Madrid sin dejarse llevar. Con la mente en el partido de la temporada, que va pasando de gran cita de Liga de Campeones en gran cita, recibía con la segunda unidad a un Leganés virtualmente salvado, sin pocas exigencias y la oportunidad de volver a conquistar el "Santiago Bernabéu" como hizo en Copa del Rey en uno de los grandes días de su historia.
El bajón de escalón para Bale y Benzema es difícil de asimilar para una gran estrella. De golpe ven como han dejado de tener la confianza ciega de Zidane e integran un grupo de jugadores que no juegan de inicio en las grandes citas.