La Federación Alemana de Fútbol abrió procedimientos legales a Franz Beckenbauer, a ex integrantes del organismo y a la FIFA, en un intento por limitar los posibles daños derivados de las denuncias de corrupción que se han hecho en torno del otorgamiento de la sede del Mundial de 2006.
En un comunicado remitido ayer la Federación afirmó que ha “tomado las medidas necesarias para evitar una posible limitación de los reclamos”; que puede hacer contra Beckenbauer, exjefe del comité organizador de la Copa del Mundo Alemania 2006 y contra el entonces vicepresidente Fedor Radmann.
También podrían surgir acusaciones contra dos ex presidentes de la Federación, Theo Zwanziger y Wolfgant Niersbach; el ex secretario general Horst R. Schmidt, los albaceas del testamento del fallecido empresario Robert Louis-Dreyfus, y la FIFA.
“A fin de salvaguardar los derechos (de la Federación), se han presentado varias solicitudes; ante un organismo de conciliación en Hamburgo”, informó el organismo alemán.