
La Fórmula Uno regresa este fin de semana al Gran Premio de Japón en el circuito de Suzuka, donde la temporada pasada el piloto francés Jules Bianchi (Marussia) sufrió un fatal accidente que terminó con su vida nueve meses después, tras un largo coma.
Apenas una semana después del Gran Premio de Singapur, la caravana de la categoría reina del automovilismo se enfrenta a un fin de semana lleno de carga emotiva, en el que pocos podrán sustraerse al recuerdo del piloto francés de la cantera de Ferrari, fallecido el pasado 18 de julio en el Hospital Universitario de Niza (Francia), donde fue trasladado tras haber sido operado en Japón, y donde se agarró a la vida durante nueve meses.
El fatal accidente en la séptima curva de Suzuka, en una carrera lluviosa en el que Bianchi perdió el control de su monoplaza y se precipitó contra la grúa que levantaba en esos momentos el coche del alemán Adrian Sutil.