La presidenta de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos de Bolivia (Apdhb), Amparo Carvajal, descartó un posible diálogo con Edgar Salazar, dirigente afín al partido en función de Gobierno y que se atribuye la representación de la institución; entre tanto, se anunció que volverán a atender desde “oficinas provisionales”.
“No hay ningún diálogo posible con ese señor (Salazar). Si es que hay justicia, tiene que pagar los perjuicios, que es mucho lo que tiene que arreglar (en el edificio)”, dijo la presidenta de la Apdhb al ser consultada sobre la reunión que se tenía que realizar el 1 de agosto.
Han pasado 67 días desde que el grupo de Salazar irrumpió y tomó el edificio de la Apdhb desde el 2 de junio; en todo este tiempo, se suspendió la atención a la población que acude a denunciar la violación de sus derechos.