
La Cancillería del Estado expresó ayer, sábado, su profunda molestia por las declaraciones públicas del Relator Especial de las Naciones Unidas, Diego García-Sayán y pidió su renuncia.
A través de un comunicado dijo que esas acusaciones debió formular en los 14 años del Gobierno de Evo Morales, donde “profesionales de la política totalitaria” organizaron un sistema de los jueces y los fiscales fueron el instrumento para silenciar, intimidar, perseguir y asesinar a los opositores políticos.
"A personajes como (Diego) García-Sayán habría que preguntarles ¿Dónde estuvieron durante los últimos 14 años que duró el gobierno del MAS?", respondió la Cancillería de Bolivia
Bolivia cree que García-Sayán no tiene autoridad moral para decir a los bolivianos cómo conducirse frente al fraude y las acciones de Evo Morales, además recordó que todo el aparato judicial montado por el MAS continúa intacto.
Asegura que el funcionario realiza un vergonzoso activismo ideológico contra los bolivianos y omite deliberadamente el hecho que en el gobierno de Morales se violaron todos y cada uno de los elementos esenciales de la democracia.
Cita los casos de acoso judicial al Magistrado Cusi; al Ingeniero José María Bakovic quién falleció al subir a la altura de La Paz acorralado por casi 30 juicios, o los crímenes extra judiciales del Hotel de Las Américas; la detención indebida del dirigente de los cocaleros de Yungas, Franclin Gutiérrez y otros.
PIDEN RENUNCIA
El Ministerio de Relaciones Exteriores pidió la renuncia de García-Sayán al cargo de Relator, el mismo que debe dejar por dignidad pues destruyó el poco prestigio que le quedaba al denunciar falsamente el uso de las instituciones judiciales y fiscales en Bolivia con fines políticos.
“García-Sayán debe renunciar (…) al permitir que la ideología prevalezca sobre la decencia, la democracia y la libertad, García-Sayán se ha descalificado a sí mismo”, dice al recodar años atrás acusó a Fujimori de fraude electoral pero ahora ignora el fraude del 20 de octubre en Bolivia.