Al menos 13 personas, ocho de ellas civiles, murieron y más de 30 resultaron heridas al explotar ayer un coche bomba en la localidad de Afrín, en el norte de Siria, una zona bajo el control de facciones opositoras sirias aliadas de Turquía, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos.
La explosión tuvo lugar en las inmediaciones de un punto de control para la inspección de vehículos a la entrada de la ciudad, ubicada al noroeste de Alepo, informó la citada ONG.
Detalló que entre las víctimas mortales hay dos menores de edadm y cuatro combatientes de facciones armadas leales a Ankara, que luchan bajo el paraguas del opositor Ejército Libre Sirio.
Por su parte, un representante de la Media Luna Roja siria, Ali Andan, dijo que los fallecidos son 12 civiles y 43 los heridos, entre ellos menores de edad, y advirtió que el número de víctimas mortales podría aumentar debido a la gravedad de las heridas de algunos de ellos.