Perú comenzó el 2019 con un varapalo a su lucha anticorrupción por la polémica decisión del cuestionado fiscal de la Nación (fiscal general), Pedro Chávarry, de destituir a los dos principales fiscales que investigan el caso Odebrecht en plena Nochevieja, cuando el país se preparaba para celebrar el Año Nuevo.
El controvertido anuncio fue hecho a escasas cuatro horas del cambio de año y publicado ayer en el diario oficial El Peruano, lo que provocó espontáneas protestas en las principales ciudades del país, que anticipan un periodo de agitación en los próximos días y semanas.
Los fiscales cesados son Rafael Vela, coordinador del equipo especial que investiga el caso Odebrecht, y José Domingo Pérez, el fiscal estrella de este grupo.