El piloto británico Lewis Hamilton (Mercedes) apostó fuerte y ganó en el Gran Premio de Mónaco, gracias a una estrategia agresiva y ayudado por un error del equipo Red Bull, con una parada muy lenta que dejó sin opciones al australiano Daniel Ricciardo, que salió desde el primer lugar.
Hamilton, que comenzó tercero, sumó la victoria número 44 de su carrera gracias a una estrategia arriesgada, en la que aguantó 31 vueltas los neumáticos de lluvia mientras se secaba la pista y luego optó por el ultrablando para realizar la segunda mitad de carrera.
"Fue una locura que los neumáticos de lluvia duraran tanto", se sorprendió Hamilton tras la carrera. El tricampeón del mundo británico suma gracias a esta victoria 82 puntos en el Mundial y se queda a 24 del líder, su compañero alemán Nico Rosberg, que hoy fue séptimo y se queda con 106 tantos.
El gran perdedor del día fue Daniel Ricciardo, que se las prometía felices al demostrar el sábado que su Red Bull era el más rápido en Mónaco, pero que se vio condenado por su propio equipo, que no tenía preparados los neumáticos en el cambio fundamental, el de la vuelta 32.