
El informe Fuego en Santa Cruz, Balance de los Incendios forestales 2019 y su relación con la tendencia de la tierra -elaborado por la Fundación Tierra- revela que, de los más de 3.6 millones de hectáreas quemadas en la Chiquitanía, el 52,7 % pertenece a tierras fiscales.
"El 52,7 % son tierras fiscales y el restante 47,3 % son tierras con derechos de propiedad titulados a favor de distintos tipos de propietarios", dice el informe de la Fundación Tierra, emitido anoche.
Resalta que más de la mitad de las tierras fiscales están dentro de áreas protegidas, tanto nacionales como subnacionales.
"Del total de las tierras fiscales, el 60 % (1.013.162 hectáreas) está ubicado dentro de las Áreas Protegidas y Parques Nacionales (San Matías) y subnacionales como Ñembi Guasu, principalmente; pero también en Otuquis, la Reserva de Vida Silvestre Tucabaca, Laguna Marfil y Copaibo", reza el documento.
Respecto al 47 % de tierras que fue incendiada y que pertenece a personas con derecho propietario, el 44,8 % se trata de tierras de Empresas Agropecuarias; el 24,1 %, Tierras Comunitarias de Origen (TCO); el 14,2 %, a medianas propiedades; el 11 %, a propiedades comunarias; y el 6 % corresponde a pequeñas propiedades.