
Opositores pedirán interpelar al ministro de Gobierno, Carlos Romero, por la supuesta vinculación de policías con el narcotráfico, mientras uniformados de base piden "despolitizar" la institución sacudida por su vínculo en hechos de corrupción y violencia sexual.
La senadora opositora Carmen Eva Gonzales y el diputado Wilson Santamaría plantearán que Romero comparezca a la Cámara de Senadores o Diputados para rendir un informe sobre el audio filtrado de supuesta relación de policías con el narcotráfico, que implicarían al director de la FELCC de Santa Cruz, coronel Gonzalo Medina, quien fue acusado de contar con bienes que no guardan relación con sus ingresos profesionales.
Santamaría manifestó que las revelaciones a partir del audio filtrado y de informes de inteligencia son elementos absolutamente preocupantes, por lo que planteará una petición de informe dirigida al titular de Gobierno para que responda a una batería de preguntas referidas a la presunta vinculación del coronel Medina y el capitán Fernando Moreira con el ilícito del narcotráfico.
“Lo más sano parece convocar al Ministro de Gobierno a la Cámara, para que venga a informar el avance de esta investigación, las razones de la destitución del ex comandante (Rómulo) Delgado, cómo es esto de que hay coroneles a quienes se está haciendo investigaciones porque han realizado viajes y aparentemente están involucrados en tema de drogas”, manifestó Santamaría.
Similar petición hará la senadora opositora Carmen Eva Gonzales quien sostuvo que el abogado y ex juez Jaime Rivero Avilés ya presentó denuncias de tipo penal ante el Ministerio Público y ante la Fiscalía Policial, acompañando un listado de bienes que posee el coronel Medina, como una mansión valuada en 850 mil dólares, en el condominio Ciudad Jardín, ubicada en la calle Bunganvillas, donde también guardaría 17 movilidades. Indicó que ambas denuncias no tuvieron ningún avance hasta el momento.
Gonzales manifestó que a este caso se suma la reciente denuncia sobre un audio e informes que hacen referencia a una entrega de 40 kilos de cocaína en la ruta Bolivia-Panamá-Estados Unidos, donde estarían implicados dos oficiales de la policía boliviana, quienes habrían salido y retornado de Panamá al país entre el 2 y 7; y 14 y 19 de marzo de este año.