La Policía de Uruguay inició la búsqueda un grupo de ciudadanos bolivianos vinculados con el narcotráfico y el secuestro de una joven de 22 años a la que torturaron por cobrarle la suma de 500 mil dólares por un cargamento de cocaína.
El traslado de la sustancia ilícita ocurrió en enero de este año, cuando a este país llegó un cargamento de 400 kilogramos de droga procedente de Bolivia, pero fue interceptada por las fuerzas del orden. Aun así, el grupo de narcotraficantes comenzó exigir el pago.
El narco uruguayo que debía recibir la droga comenzó a recibir amenazas, por lo que ordenó a su pareja que reúna el dinero y lo entregue una vez que haya alcanzado la suma acordada. La mujer logró reunir los 500 mil dólares y los metió a una maleta, pero no quiso dejarla en su domicilio por el temor de ser interceptada por los bolivianos que buscaban su paga.
Llevó el dinero a casa de una amiga, la joven de 22 años. Días después, un grupo de cinco narcos bolivianos ingresaron a la casa de la mujer y tras no encontrar el dinero secuestraron a la joven por 24 horas. Fue hallada atada de manos y pies y con varias heridas en las piernas.
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