En el mayor canje de prisioneros desde la Guerra Fría, Estados Unidos y varios países aliados intercambiaron con Rusia a 24 presos, entre ellos el periodista estadounidense Evan Gershkovich y el hispano-ruso Pablo González, en el aeropuerto de Ankara y bajo la coordinación de los servicios secretos turcos.
Según confirmaron la Casa Blanca y el Servicio Federal de Seguridad ruso (FSB), Moscú puso en libertad a 16 personas: tres ciudadanos estadounidenses y una persona con residencia legal en Estados Unidos, además de a cinco alemanes y siete rusos, mientras que Estados Unidos y sus aliados excarcelaron a otras ocho personas que fueron trasladadas a Rusia, junto con dos menores de edad, lo que sitúa el número total de liberados en 26.
El canal turco NTV precisó que los reos fueron trasladados a la capital turca procedentes de siete países.