
Los trabajos de explotación del Cerro Rico de Potosí, que comenzaron en 1545, podrían llegar a su fin dentro de diez años, esa es la meta que se fijó el Ministerio de Minería y la Corporación Minera de Bolivia (Comibol).
El gerente regional de la Comibol, Ramil Silvestre, informó que están encarando la reubicación de las diferentes secciones de cooperativas que están por encima de la cota 4.400 pero tienen una meta mayor que es la de retirar a todas las unidades productivas en un lapso de entre cinco a diez años.
“Se habló también con Fedecomin que la migración a mediano y largo plazo se va a realizar de aquí a cinco o diez años, porque es a largo plazo pero va a ser pues el retiro, el abandono de todas las bocaminas, completamente del cerro van a tener que salir a las áreas rurales donde se les pueda dar las condiciones necesarias para que hagan ese trabajo”, apuntó el entrevistado.
Los cooperativistas mineros habían señalado que solo saldrán del yacimiento minero si es que les otorgan áreas de trabajo certificados con acceso a los servicios como caminos, agua y electricidad.
Ramil Silveste destaca que ese es el objetivo del Ministerio de Minería y la Comibol pero, hay que dar condiciones y tienen ese lapso de cinco a diez años para acondicionar los yacimientos, hacer prospección, exploración y darles a las cooperativas yacimientos evaluados con leyes y la geometría del yacimiento identificada para que puedan colocar en condiciones caminos, energía electricidad y otros más que son necesarios.
Es por primera vez que se habla de un plazo para el retiro de todos los cooperativistas del yacimiento que ostenta el título de Patrimonio de la humanidad.
MUCHO
La presidenta del Comité Cívico Potosinista (Comcipo), Roxana Graz, calificó como muy largo el plazo establecido por las autoridades mineras para dejar sin actividades de extracción de carga al Sumaj Orcko.