Con la apertura del frasco B, el 10 de junio, de la muestra del futbolista de Bolívar Ramiro Vaca, por resultado adverso (positivo) que dio en un partido de la fase de grupos de la Copa Libertadores de América contra Sporting Cristal de Perú, el caso no terminó y todavía hay un camino por seguir antes de conocer la resolución final.
En 2015 la Agencia Mundial Antidopaje (AMA) incluyó en su código una guía de referencia para el deportista, explica cómo se realizan los controles, los procedimientos y las sanciones a las infracciones.
El 13 de mayo se conoció la suspensión provisional de Vaca por parte de la Conmebol por el positivo en la muestra de orina depositada en el frasco A.
Al día siguiente, el 14, el futbolista emitió un comunicado. Indicó una frase que puede ser determinante para cuando el tribunal de expertos que maneja el caso emita una resolución. “Jamás he consumido ninguna sustancia prohibida de forma intencional”, publicó Vaca.
Al respecto, la AMA tiene un criterio reflejado en la guía para atletas cuando se trata de un castigo por una infracción intencional: “Existe un fuerte consenso en todo el mundo, y en particular entre los deportistas, de que los infractores intencionales deben ser suspendidos durante cuatro años”.