Rodrigo Hernández “Rodri” se convirtió en el segundo hombre nacido en España que gana el Balón de Oro, 64 años después de que lo hiciera Luis Suárez, mientras que Aitana Bonmatí repitió el triunfo e igualó a dos con su compañera y compatriota Alexia Putellas, en una gala marcada por la decepción de Vinícius, el máximo favorito, que ni siquiera viajó a París.
“Este es un premio al fútbol español, a tantos que no lo han ganado y la han merecido (...) Pero también a la figura del medio centro, que hace una labor que no se ve y que yo doy ahora visibilidad”, señaló el ganador, que subió al estrado con muletas, por la lesión que atraviesa, y recibió el premio de manos del liberiano George Weah, el único africano que ganó el Balón de Oro.
Rodri se acordó de Xavi Hernández, de Andrés Iniesta, de Sergio Busquets y de Iker Casillas, pero también de Dani Carvajal, su compañero en la selección, del que dijo que “también lo merecía” este año y que sufrió una lesión similar a la suya.
Fue el único guiño al Real Madrid del vencedor de la noche, que superó a los madridistas Vinicius y Jude Bellingham, con Carvajal como cuarto, ganadores todos ellos de la Liga de Campeones, un trofeo que valió al club ser elegido el mejor del año, así como a su entrenador, Carlo Ancelotti.
Bonmatí repitió un año después de haber ganado el premio por vez primera, y sumó así el cuarto título consecutivo del Barça, tras los dos que había ganado Alexia Putellas, el exponente de una buena noche para los azulgrana, que se apuntaron también el premio al mejor club femenino y el trofeo Kopa a mejor sub 21, que recayó en Lamine Yamal.
Ningún integrante del Real Madrid asistió a la gala de premiación y muchos suponen en protesta porque Vinícius no ganó el Balón de Oro.