
Con la influencia ofensiva de Julián Álvarez, la creatividad de Kevin de Bruyne, la insistencia de Jack Grealish y el juego coral del resto, el Manchester City goleó 4-1 al Liverpool y lanzó un mensaje al Arsenal: la Premier League está más viva que nunca.
Los ‘citizens’ resolvieron a lo grande un encuentro complicado que acabó como si fuera una sesión de toreo en la Maestranza, con los ‘olés’ de sus aficionados en los últimos minutos, en los que incluso se atrevieron a corear un “campeones, campeones” pese a estar todavía cinco puntos por debajo del Arsenal, que venció 4-1 al Leeds.
Mohamed Salah, en un contragolpe perfecto, abrió el marcador cuando el partido se acercaba al minuto 20 y el DT Pep Guardiola tuvo que lidiar con ese toro sin su hombre gol, Erling Haaland, afectado de una lesión en una ingle. Por tanto, a Julián Álvarez le tocó cubrir la ausencia de Haaland y no defraudó. Marcó a los 27’ el tanto del empate (1-1) y asistió a Kevin De Bruyne (46’) para el 2-1, mientras que Ilkay Gündogân (53’) y Jack Grealish (74’) sentenció el pleito.