Con una votación de 24 a favor entre 26 asistentes, el congreso de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) aceptó ayer en Cochabamba la renuncia irrevocable de Rolando López a la presidencia por los problemas extra futbolísticos que afronta con la Universidad Mayor de San Simón y de manera interina asume Marco Peredo por su condición de primer vicepresidente.
Este congreso fue convocado por López cuyo tema central era la presentación de su renuncia irrevocable, aunque a la Federación hasta la fecha no llegó una carta oficial sobre este tema. Los dirigentes de la Liga y de la Asociación Nacional de Fútbol no vieron necesario contar con esta nota porque la citación para esta reunión que hizo López a finales de 2016 iba en este sentido.
De los 12 elencos de la Liga en la votación, 10 aceptaron la renuncia de López, Wilstermann no estuvo a favor de esto y Bolívar se abstuvo de emitir su criterio, mientras que los 12 miembros de la Asociación Nacional se sumaron a la postura de apartar a López del cargo. El secretario general, Marco Rodríguez, y el segundo presidente de la Federación, Freddy Cortez, también fueron por este camino para completar los 24 votos.