El alemán Nico Rosberg (Mercedes) se proclamó ayer por primera vez en su carrera campeón del mundo de Fórmula Uno tras acabar segundo, por detrás de su compañero de equipo, el británico Lewis Hamilton, en un estratégico y emocionante Gran Premio de Abu Dabi, vigésima primera y última prueba del certamen.
Nico Rosberg llegó al circuito Yas Marina con 12 puntos margen sobre Hamilton y salió de él con cinco de margen.
Hamilton, tres veces campeón mundial, cumplió y se apuntó el triunfo, el quincuagésimo tercero de su carrera y el décimo de la temporada que ayer domingo vivió su último capítulo. El inglés necesitaba ganar en Abu Dabi y esperar que Rosberg no terminara en el podio, algo que no se produjo, pese a la tensión final de la prueba.
El nuevo campeón mundial fue valiente en la carrera de cierre y aguantó la presión final para conservar la segunda plaza que le dio la corona y lo convirtió en el trigésimo tercer campeón mundial de la historia 34 años después de que lo logró su padre, el finlandés Keke Rosberg.