El 19 de junio de 1813, las tropas rioplatenses de Manuel Belgrano ingresan a Potosí, luego de haber derrotado a las realistas de Juan Pío Tristán en la Batalla de Salta.
Fue un día como hoy, sábado, pero, curiosamente, en horas de la noche, según escribió el autor anónimo de los anales de Potosí de ese año:
"Sábado 19 de junio de 1813 a la diez de la noche, se entró sin que se sienta persona alguna ni participar a nadie, el señor general don Manuel Belgrano Pérez a su palacio, quien repentino y descuido de todos consiguió su deseo; dejando las prevenciones de arcos, colgaduras, bailes, invenciones y jaranas de todo el vecindario a todos con sus deseos y grandes ganas y porque a este tenor no le gustaba cosas de contemplación, bulla ni fantasía".
Aunque el cronista anónimo señala que Belgrano ingresó en secreto por rehuir homenajes, no están del todo claros los motivos para esa actitud y por eso es que se especula al respecto. En sus memorias, el lugarteniente de Belgrano, el general José María Paz, cuenta cómo fue recibida la avanzada del ejército del norte, encabezada por Eustoquio Diaz Velez, pero no da detalles del ingreso de su jefe.
Se dice que el recibimiento a la avanzada fue tan espectacular, y que los unformes de los soldados potosinos eran tan lujosos en comparación a los de los rioplatenses, que Belgrano prefirió evitar más situaciones incómodas.
Los potosinos se enteraron que el general rioplatense ya se había instalado y nada más pudieron hacer para homenajearle porque, además, al día siguiente, domingo, había oficios religiosos vinculados a Corpus Christi, que en la Villa Imperial se celebraba durante varios días. Los anales incluyen esos actos:
"En la tarde de ese día (domingo 20), salió en procesión el santísimo (sacramento del altar) para lo cual mandó acordonar las cuatro cuadras del tránsito por ambos costados con los soldados más decentemente uniformados...".
No obstante, Paz sí detalla cómo fue la salid de Belgrano a Potosí, en noviembre de ese mismo año 13. Al hacerlo, ordenó volar la Casa de Moneda. Pero esa es otra historia...
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