
SOBREEVALUADO
Para lograr controlar la inflación y mantener bajos los precios de productos importados, el Gobierno sostiene desde hace años una política de precio fijo del dólar, a Bs 6,96. Ese precio fijo implica que el boliviano está sobrevaluado, es decir vale más que su "precio real".
El economista Gonzalo Chávez dijo: "según cálculos del FMI, actualmente el boliviano está sobrevaluado en un 26 %. Si esa estimación es correcta, entonces el dólar debería costar en Bolivia 26 % más, es decir 8,82 bolivianos".
Un libro, de próxima aparición, desmiente que la economía boliviana se haya triplicado en la última década, como afirma el Gobierno del MAS con frecuencia. El ingeniero y especialista en finanzas, Miguel Roca, refuta en su próximo texto que el tamaño de la economía boliviana sea hoy tres veces más grande que en 2006.
El texto "Proceso de cambio, el milagro que no fue" ofrece un panorama completo de la evolución de la economía y la inversión pública de Bolivia entre los años 2006 y 2016.
La frecuente afirmación del Poder Ejecutivo de que el Producto Interno Bruto (PIB) boliviano subió de $us 9.574 millones, a 36.000 en 2016, es, por tanto, incorrecta.
Respecto de la supuesta "triplicación" del tamaño de la economía, Roca dice que las cifras que presenta el Gobierno se deben a un truco estadístico: el Gobierno ofrece los datos del PIB, a precios corrientes, es decir sin tomar en cuenta la pérdida del valor adquisitivo, dividiéndolo luego por el tipo de cambio del dólar que, además, mantiene al boliviano sobrepreciado.
"Los números (que ofrece el Gobierno) son el resultado de tomar el PIB a precios corrientes para cada año y dividirlo por el tipo de cambio oficial al 31 de diciembre de cada año, es decir calcular el tamaño del PIB en términos nominales a precios corrientes de cada año sin tomar en cuenta la pérdida del valor adquisitivo de la moneda nacional ocasionada por la inflación", dice el libro, editado por la Fundación Pazos Kanki.
Roca puso un ejemplo para entender mejor la situación: "digamos que un campesino produce 100 papas a un boliviano cada una, ello da un total de 100 bolivianos de venta. Si el siguiente año el mismo campesino produce 110 papas, pero a dos bolivianos cada una, entonces tendría una venta de 220 bolivianos. A precios 'corrientes', el aumento es de 54 %. Pero a términos constantes (que refleja el aumento en la producción, no del precio), el crecimiento es solo de 9 %. Ese es el crecimiento 'real'".