
Bolivia recibirá un préstamo por valor de 40 millones de dólares del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) con el objeto de mejorar su respuesta ante los desastres naturales, según informó ayer miércoles la institución de financiera. Un total de 5.477 hogares se beneficiarán de esta cuantía, que se empleará en mejorar los recursos existentes en el territorio para reaccionar o evitar catástrofes en las zonas más vulnerables de las cuencas de rocha y Alpacoma, que se encuentran en los departamentos de Cochabamba y La Paz, según un comunicado.
Entre 1970 y 2016, 70 desastres naturales causaron la muerte a 1.500 personas y afectaron a 7.7 millones de Bolivianos, con las correspondientes consecuencias económicas debidas a los efectos negativos que tuvieron en el tejido productivo.
Entre las actuaciones que se financiarán con el préstamo se encuentran el diseño de acciones para reducir riesgos y medidas de adaptación al cambio climático.
También diferentes tipos de obras podrán beneficiarse de esta cantidad, entre ellas aquellas para el acondicionamiento basados en ecosistemas como gaviones, protección de diques, de regulación de crecidas, recuperación de cauces, estabilización de laderas, control de drenajes y erosión o reforestación.