Bolivia pierde 1.000 millones de dólares al año por efectos de la actividad ilícita del contrabando, aseguró ayer sábado el presidente Evo Morales.
"De acuerdo a los datos oficiales del Gobierno nacional, en promedio Bolivia pierde 1.000 millones de dólares por el contrabando", declaró el primer mandatario en un acto en el poblado de Orinoca.
El jefe de Estado se refirió al tema al criticar a Chile por la poca predisposición para luchar contra el contrabando. "No puede ser que un país vecino no coadyuve con la lucha contra el contrabando", sostuvo.
Manifestó que las consecuencias son graves para la industria nacional en particular, reflejó que según los datos de la Confederación de Empresarios Privados los daños por el contrabando alcanzan a 2.000 millones de dólares. "Lo que afecta en el crecimiento económico".
Observó que algunos grupos dentro del Gobierno chileno tengan una actitud discriminatoria incluso contra la vestimenta de los bolivianos, en clara alusión a la madre de uno de los nueve detenidos en Iquique, a quien se le sugirió que no use pollera para ingresar al penal de Alto Hospicio.
Se refirió al último veto a los presidentes de la Cámara de Senadores y Diputados, José Alberto Gonzales y Gabriela Montaño, respectivamente, a quienes se les negó la visa de ingreso a ese país.
La obstaculización a los periodistas bolivianos que en dos casos distintos les restringieron el derecho a realizar cobertura sobre diferentes temas. O la prohibición de distribuir el Libro del Mar en las unidades educativas.