El papa Francisco criticó ayer la indiferencia ante aquellas personas que viven al margen de la sociedad o en condiciones infrahumanas y pidió “que no sean olvidadas por las instituciones y nunca sean descartadas”, en el videomensaje con sus intenciones de oración para septiembre.
“¿Cómo dejamos que la “cultura del descarte”, en la que millones de hombres y mujeres no valen nada frente a los beneficios económicos, cómo dejamos que esta cultura domine nuestras vidas, nuestras ciudades, nuestro modo de vivir? Se nos va a endurecer el cuello de tanto mirar al otro lado para no ver esta situación”, asevera Francisco en su mensaje.
Por ello pide que se deje “de hacer invisibles a los que están al margen de la sociedad, ya sea por motivos de pobreza, dependencias, enfermedades psíquicas o minusvalías” y nos centremos en “acoger a todas las personas que lo necesitan”.