China, criticada por su falta de transparencia sobre la pandemia, anunció unas 60.000 muertes de covid-19 desde el levantamiento hace un mes de sus restricciones sanitarias, pero la Organización Mundial de la Salud pidió datos detallados.
Después de tres años aplicando restricciones draconianas, China levantó abruptamente la mayoría de sus disposiciones sanitarias contra el coronavirus a principios de diciembre, tras unas protestas contra la severidad de estas medidas en varias ciudades del país. Desde entonces, el número de pacientes creció considerablemente. Los hospitales se vieron desbordados por los pacientes ancianos y a los crematorios llega un gran número de cadáveres. Pese a ello, las autoridades solo habían informado hasta ahora de un pequeño número de muertes.