El presidente iraní, Hasan Rohaní, aseguró que Irán “nunca acudirá a la mesa de negociaciones bajo presión” ni empezará conversaciones con Estados Unidos “desde una posición de debilidad”.
Rohaní dijo que “la política de máxima presión está condenada al fracaso” pese a que EEUU pensaba que con la imposición de sanciones Irán se iba a rendir en unos meses y aceptaría su voluntad.
Donald Trump volvió a imponer sanciones a Irán tras retirarse en mayo de 2018 del acuerdo nuclear, que había sido firmado en 2015 por el llamado Grupo 5+1.
“Si EEUU vuelve al JCPOA (sigas en inglés del pacto nuclear) y levanta las sanciones podrá regresar a la mesa de negociaciones en el marco del Grupo 5+1, de lo contrario no habrá negociaciones”, subrayó Rohaní.