Contundente. Ayer en una tarde inspirada, Real Potosí, sacó a relucir toda su garra y puso de rodillas al último campeón con una goleada por 4-1 ayer en el estadio “Víctor Agustín Ugarte”. Los lilas van de menos a más en el certamen Apertura y ayer lo demostró en el duelo de la séptima fecha y logró conjuncionar las tres “G” (gustó, ganó, y goleó).
El resultado cayó tan mal a Wilstermann que, al final del cotejo, el cuerpo técnico y el jugador Serginho protagonizaron una serie de acciones: primero increpando a personal del cuerpo técnico de Real Potosí, luego al árbitro, y por último en contra de la prensa deportiva que se encontraba en la pista atlética.
EL PARTIDO
Los lilas comenzaron el duelo con la idea de hacerse de los tres puntos y, con esa mentalidad, se fue al frente de ataque desde el primer minuto.
Apelando a la velocidad de Maximiliano Gómez, Francisco Pastor, Rodrigo Borda y Rivaldo Melchor, los lilas empezaron a aproximarse al arco defendido por Hugo Suárez.
A los seis minutos del cotejo empezó a emerger la figura del ibérico Francisco Pastor con la conquista del primer tanto. El jugador aprovechó su velocidad para vencer a Edward Zenteno y sacar un remate cruzado para dejar sin chance al meta Hugo Suárez.
Cuando el cotejo estaba por concluir en su primera etapa, Wilstermann aprovechó un tiro libre para igualar las cosas. Serginho clavó el esférico al ángulo superior de Gustavo Salvatierra a los 44 minutos dejando fríos a los espectadores, que asistieron al estadio de la zona de San Clemente.
En el complemento el cuadro dirigido por Marcos Ferrufino hizo un juego mucho más inteligente y clavó las estocadas en el momento justo.
Wilstermann se adueñó del trámite del juego y apeló a toda su artillería para adelantarse en el marcador pero, nuevamente, apareció la genialidad de Francisco Pastor que, luego de librarse de la marca de Zenteno, sacó un remate al ras del piso y puso las cosas 2-1, a los 62 minutos.
Oscar Baldamor se encargó de dar el tiro de gracia a los aviadores. Apareciendo como un fantasma el zaguero conectó un cabezazo el centro desde el tiro de esquina mandando el balón al fondo de las redes, a los 75 minutos.