
El Papa Francisco y el presidente de Rusia, Vladímir Putín, hablaron ayer sobre la situación en Venezuela, Siria y Ucrania, durante la reunión de casi una hora que ambos mantuvieron en el Vaticano, según informó la Santa Sede.
En un escueto comunicado, el Vaticano calificó la reunión de "cordial" y en la misma expresaron su satisfacción por el desarrollo de las relaciones bilaterales, "reforzadas" con la firma de un memorando de entendimiento para colaborar en el hospital pediátrico "Bambino Gesu" y otros de la Federación Rusa.
También hablaron de "cuestiones relevantes para la vida" de la Iglesia Católica en Rusia, país de mayoría ortodoxa, así como de "la cuestión ecológica" y de temas internacionales "con especial referencia a Siria, Ucrania y Venezuela", aunque sin indicar el contenido.