
El gobernante venezolano, Nicolás Maduro, ordenó ayer al cuerpo de milicia, que ya integran, según el mandatario, más de dos millones de combatientes, dedicarse a la producción de alimentos, al tiempo que prometió un milagro económico en el país caribeño, azotado por una severa crisis.
"En este momento procedo a darles la orden a las 51.743 unidades populares de defensa integral de dedicarse a la producción en todo el territorio nacional, para ver reverdecer un milagro productivo", dijo Maduro durante un acto con los milicianos en el suroeste de Caracas.
"Fusil al hombro, listos para defender la patria, y abriendo el surco para sembrar la semilla y producir el alimento para la comunidad, para el pueblo", añadió. Venezuela, el país con las mayores reservas probadas de petróleo en el planeta, atraviesa por una acuciante crisis económica que se traduce en escasez e hiperinflación.