
Dirigentes del Distrito Vecinal Uno recurrieron a un panificador libre para que elabore pan de batalla con la finalidad de verificar si es correcta la demanda de los panificadores de subir el precio de 33 a 40 centavos de Boliviano.
Durante la prueba desarrollada ayer se demostró que de un quintal de harina se puede sacar 1.535 panes de entre 40 a 47 gramos de peso, lo que de acuerdo a su apreciación no corresponde implementar incremento de precio alguno.
El presidente del Distrito Vecinal Uno, Irineo Bejarano, informó que el trabajo desarrollado en una panadería permitió demostrar que los panificadores tienen un adecuado margen de ganancia y no están en pérdida como señalan los que actualmente encaran un paro demandando la subida de precio de ese fundamental alimento.
PRUEBA
La prueba de campo desarrollada ayer contó con la participación de dirigentes vecinales y miembros de la prensa con la finalidad de que queda sentado el resultado logrado en la panadería.
Se utilizó la harina tipo 000 que no es la que la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa) entrega a los panificadores en un precio menor al del mercado con la finalidad de que se mantenga el precio a la población.
Con pan que tiene un precio de mercado se habría evidenciado que existe un margen de ganancia por lo que la demanda de los panificadores agremiados no tendría un sustento lógico.
DE NUEVO
Los dirigentes vecinales consultados sobre las razones que llevaron a realizar la prueba de campo indicaron que frente a la demanda de los panificadores asociados de que se suba el precio a 40 centavos de Bolivianos quieren hacer ver a la sociedad que no existe una razón para ello.
Están dispuestos a repetir el trabajo pero esta vez con la participación de un notario público para que quede constancia de los resultados y se los pueda aplicar posteriormente en cualquier instancia de diálogo o negociación.