Cuando falta poco tiempo para que los estudiantes vuelvan a sus escuelas surge el pedido de una madre de familia de que la Policía controle el servicio que prestan los civilianes.
La mujer compartió una fotografía en la que se ve a dos niños casi colgados de la puerta del vehículo.
Según la denunciante, uno de los menores tenía el 50 por ciento del cuerpo fuera del civilian, lo cual le ponía en un alto riesgo debido a la imposibilidad de mantenerse en esa posición cuando el vehículo gire hacia la izquierda y podría caer a la calle con el riesgo de ser arrolado por otro automovil que viniere por detrás.