
Las precipitaciones pluviales en la cordillera del Kari Kari descendieron un 75 por ciento en los últimos años, según los reportes de meteorología de las estaciones de la zona.
El alcalde Williams Cervantes confirmó el descenso del nivel del agua que cae en el ciclo hidrológico y anunció que la tendencia es que esa situación permanezca estacionaria durante varios años.
A consecuencia de la merma de los volúmenes de agua en la región, donde se encuentran las lagunas potosinas, se tendrá que enfrentar la falta de agua esta y las siguientes gestiones.
La población de la zona alta enfrenta desde 2015 la falta de agua para su consumo, lo que obligó a la Administración Autónoma Para Obras Sanitarias Potosí (Aapos) declarar estado de emergencia, reducir la entrega por tubería elevando la distribución del recurso a través de carros cisterna.
Este año se reportó un leve incremento en el nivel de agua de las lagunas, pero no será suficiente para garantizar la entrega del líquido durante toda la gestión. Así, Aapos lleva adelante una serie de acciones que están en proceso de implementación para contar con un volumen mayor de agua para su entrega a la zona alta de la Villa Imperial.
PROYECTOS
El alcalde potosino postula el proyecto de bombeo de agua de la zona de Paranturí para acceder a las aguas del Pilcomayo para su entrega a la gente de la zona alta de la ciudad de Potosí.
Al momento ya se cuenta con algunos estudios, por lo que se puede afirmar que se podría traer 200 litros por segundo por bombeo, a través de una tubería que contará con una extensión de 45 kilómetros.