
“Lamentamos por algunas autoridades, por alguna persona que está contratando sicarios para hacerme desaparecer de este mundo”. Así denunció Jhonny Llally, presidente del Comité Cívico Potosinista (Comcipo), sobre un grupo de encapuchados que pretendieron acabar con su vida cuando estaba haciendo campaña por “No” a la relección del presidente Evo Morales en el norte potosino.
“Gracias a Dios, gracias a los compañeros del norte han resguardado mi vida”, agradeció. Luego contó que había como 10 a 15 personas con el rostro cubierto que lo buscaban en la flota que se trasladaba al municipio de Sacaca.
Según el dirigente, estas personas entraron al bus y registraron todos los asientos y buzones para detenerlo. “Denunciamos que ya no hay seguridad en Bolivia, prácticamente si alguien dice lo contrario a lo que dice el presiente (Evo Morales), tienen que contratar sicarios o terroristas”, dijo.
El presidente de Comcipo afirmó que seguirá realizando la campaña por el No a la reforma parcial de la Constitución Política del Estado. “Lo decimos: textual. No tengo miedo y no voy a dar un paso atrás, vamos a ir con esta campaña, lo cual nos hemos trazado, vamos a seguir luchando. No tengo miedo ni a los terroristas, y a nadie”, afirmó.
Llally afirmó que en tres lugares hicieron parar el bus en el que viajaba y logró ver que las personas estaban armadas con cachorros de dinamita.
Frente a la denuncia del presiente de Comcipo, el gobernador del Departamento, Juan Carlos Cejas, recordó que los bolivianos vivimos en un país democrático donde se respeta el estado de derecho.
Exhortó al presidente de Comcipo u otras personas que se sientan perseguidos o amenazados hacer la denuncia a la Policía o al Ministerio Público para que se inicie una investigación.
“Lamentamos mucho de que se pretenda atentar contra la vida de las personas. Por tanto, desde la Gobernación, nosotros convocamos a respetar la ideología de los ciudadanos”, expresó.