Guabirá quedó fuera de la zona del descenso de categoría, empujado por un triunfo por la cuenta de 2-0 frente a Independiente, saboreando este resultado en el estadio Gilberto Parada, de Montero, donde se despidió de su afición con el deber cumplido, después de una gestión con altibajos futbolísticos.
Los Diablos Rojos sólo dependían de ellos mismos e hicieron realidad la conquista de los tres puntos, dejando a Libertad Gran Mamoré en el ascenso-descenso indirecto de categoría y a Vaca Díez junto a Palmaflor en el directo.
Los goles de los azucareros fueron anotados por Milciades Portillo, a los 38 minutos, y por Gustavo Peredo, a los 74´. Hubo momentos en los cuales, Independiente puso en figurillas al local, pero sus intenciones quedaron cortas y se quedó con la cuenta en blanco.
El gol de Portillo fue gracias a un disparo de zurda dentro del área, aprovechando un enredo de los defensores por despejar un balón que llegó a su posición desde un saque lateral. En la segunda parte, el 2-0 de Peredo fue anotado con un golpe de cabeza, tras un rebote que dio el arquero Germán Araúz en un balón sorpresivo que llegó a la ubicación de Alejandro Quintana.
A estas alturas del partido, Independiente estaba relegado en su lado del campo, jugando con diez hombres, por la expulsión de Omar Morales, a los 55 minutos. Fue difícil para el ´Inde´ manejar esta inferioridad numérica, porque delante tuvo un rival que estaba pensando en ampliar la cifra para evitar problemas y sorpresas en los demás encuentros de la fecha 34.
Los rojos cerraron el año con el alivio de seguir en el profesionalismo, al menos, un año más, llegando a seis temporadas consecutivas representando a Montero. En el lado del club de la Capital quedó el sabor amargo, porque hace dos años atrás, en este mismo escenario, estaba festejando su primer título y en esta ocasión se quedó sin pena ni gloria.
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