
Contra los cánticos de "Bartomeu dimisión", presidente del FC Barcelona, Lionel Messi volvió a dar un balón de oxígeno a un club crispado en lo institucional, al lograr el argentino un póquer de goles y ser el gran protagonista del triunfo de su equipo ante el Eibar (5-0).
El conjunto vasco sumó un nuevo partido en el "Camp Nou" de vacío, ya que en su sexta visita a "Camp Nou" se llevó una nueva derrota.
El partido se planteó como un nuevo desafío para el Barza ante un rival que le iba a apretar desde el primer instante pero no logro su cometido.
Mientras el Barcelona intentaba asentarse en el campo y superar un susto de un gol del Eibar en el minuto 4, anulado por fuera de juego de Sergi Enrich, Messi en el 14 recibió un balón en la frontal, se deshizo de los dos centrales, con túnel a Arbilla, aguantó la presión de Diop y ante la salida de Dmitrovic, le superó por algo en un toque sutil (1-0).
El Barza vio peligrar su ventaja en un disparo durísimo de Escalante desde fuera, en una de las pocas acciones ofensivas del Eibar, muchos más interesado en la contención.