
Un gol que vale tres puntos, un liderato, y un golpe en la mesa antes de la entrega hoy del Balón de Oro en París. Leo Messi anotó el 1-0 con que el Barcelona derrotó ayer al Atlético de Madrid en un épico partido bajo la lluvia que bajó el telón a la fecha 15 de la Liga.
Con estos tres puntos en el Wanda Metropolitano, el conjunto culé dio caza al Real Madrid, que había ganado el sábado al Alavés (2-1) en Vitoria, y lo superó por su mejor diferencia de goles.
El conjunto dirigido por Ernesto Valverde adelantó también al Sevilla (3º), que había ganado horas antes por la mínima al colista Leganés.
"Son tres puntos importantísimos, aquí siempre se sufre", afirmó a la cadena Movistar el técnico culé al término del partido.
Lluvia de agua desde el inicio, pero sequía de goles hasta el minuto 86. Pese a la intensidad y las ocasiones para ambos equipos, parecía que ninguno de los dos arqueros, el esloveno Jan Oblak y el alemán Marc André Ter Stegen, dos de los mejores del mundo, tendrían que recoger ningún balón del interior de su arco.