
El problema económico y dirigencial de Sport Boys aparece como una sombra sobre la intención de la Federación Boliviana de Fútbol (FBF) de reanudar el torneo Clausura el fin de semana, dejando de lado si se resuelve en los siguientes días los conflictos sociales que vive el país.
La dirigencia de la Federación espera que la convulsión social baje en las ciudades donde continúan los bloqueos y los enfrentamientos para dar la orden de reanudar el campeonato este fin de semana, pero desde la agremiación de futbolistas informaron que no permitirán que el Clausura siga su marcha si no existe una solución para la crisis de Sport Boys, cuyo presidente, Carlos Romero (exministro de Gobierno), desapareció desde la anterior semana.
"Si la FBF toma la decisión de seguir con el campeonato imaginamos que tienen una salida frente al problema de Sport Boys, no puede dejarse a un club en esas condiciones", declaró David Paniagua.