El Manchester City demostró ayer que no puede permitirse más pinchazos y venció a domicilio al Crystal Palace con tantos de Gabriel Jesús y David Silva (0-2) para meter presión al Liverpool de cara a la lucha por el liderato de la Premier League.
Los celestes, que llegaban con una desventaja de ocho puntos a Selhurst Park, casa del Palace, sabían que una victoria les permitía traspasar toda la presión a Liverpool.
El City tuvo el mando del partido, sus ataques fluyeron rápidamente, no sufrió en defensa y el único punto negro era la definición, tarea que se encargó de arreglar Gabriel Jesús.
El brasileño abrió el marcador con un cabezazo que se coló junto al palo a pase de Bernardo Silva. Eso ocurrió en el minuto 39 y dos más tarde, David Silva culminó un espectacular pase a "cucharita" de Raheem Sterling para poner el 0-2 y dejar el encuentro sentenciado.