Despidiendo los nervios, apretando los puños al final, Garbiñe Muguruza se convirtió ayer en la segunda española en lograr el título en Wimbledon al derrotar en la final a la estadounidense Venus Williams, por 7-5 y 6-0 en una hora y 17 minutos, en una gran exhibición final de poderío, y sumar así el segundo título del Grand Slam de su carrera.
El rey Juan Carlos presenció en la primera fila del palco real el histórico triunfo de Garbiñe en la central de Wimbledon, donde la española se impuso para hacerse con su segundo grande, tras el logrado en Roland Garros el año pasado cuando venció a Serena Williams en la final. Un triunfo que le devolverá al quinto puesto mundial.
Hace 23 años, Conchita Martínez, actual entrenadora de Garbiñe en este torneo, derrotó en la final a la estadounidense Martina Navratilova, como Venus de 37 años entonces, para ser la primera española en triunfar en el grande londinense.