Atlético Paranaense viajó a Bogotá, donde defenderá un gol de ventaja ante el Millonarios, sin temor a los 2.640 metros sobre el nivel del mar donde se ubica el estadio de El Campín, sede del decisivo partido de vuelta de la segunda fase de la Copa Libertadores.
El plantel rojinegro aterrizó la pasada noche en la capital colombiana con 20 jugadores, con la novedad del delantero Nikao (baja por suspensión en la ida) pero aún sin el central Thiago Heleno, con problemas en la regularización de su ficha.
El técnico Paulo Autuori quiso restar importancia a la altitud en Bogotá, donde los tres últimos equipos brasileños que jugaron en eliminatoria contra Millonarios perdieron (Sao Paulo en 2007, y Palmeiras y Gremio de Porto Alegre en 2012, todos en la Copa Sudamericana) y quedaron fuera del torneo.
"No hay ninguna preparación especial. Estoy acostumbrado a jugar en altitud", dijo Autuori.