Buena parte de los males del fútbol boliviano pueden tener los días contados con la aplicación del reglamento de Licencias de Clubes, que la Conmebol aprobó el 13 de septiembre de 2016 y que sus federaciones miembros están obligadas a ponerlo en práctica a partir de 2018. De lo contrario, los clubes que no tengan esta autorización no podrán participar en la Copa Conmebol Libertadores ni en la Sudamericana. El trámite para recibir el permiso se inicia en septiembre.
Entre los objetivos que persigue este estatuto figura el de ordenar el fútbol, transparentar la administración del mismo y promover nuevos valores, tres elementos clave de los que carece el fútbol nacional, y que son las causas principales para sus males. Para tener acceso a la licencia, los clubes deberán cumplir algunas exigencias, en las que se toman en cuenta cinco criterios: deportivos, infraestructura, administrativos, jurídicos y financieros.