
El Consejo de la FIFA perdió a su primer miembro por un escándalo de corrupción.
Wolfgang Niersbach renunció ayer al ente rector después que fue rechazada su apelación contra un veto del fútbol por irregularidades en la candidatura de Alemania para conseguir la sede de la Copa del Mundo de 2006.
El comité de ética de la FIFA impuso la suspensión de un año después de determinar que Niersbach era culpable de no reportar sus hallazgos sobre posible conducta antiética y conflictos de interés durante el proceso de la candidatura.
La FIFA informó que su comité de apelaciones coincidió con su comité de ética "de que un veto de un año de participar en cualquier actividad relacionada con el fútbol a nivel nacional e internacional es (un castigo) adecuado en este caso".
Niersbach respondió al veredicto anunciando su renuncia a sus cargos en las juntas administradoras de la FIFA y la UEFA.