
El inglés Lewis Hamilton (Mercedes) ganó ayer el Gran Premio de Brasil y pospuso de esta manera el desenlace del Mundial de Fórmula Uno más largo de la historia, cuyo título discutirá a su compañero y rival alemán Nico Rosberg -segundo en Interlagos- dentro de dos semanas, en Abu Dabi.
Hamilton, de 31 años, logró su novena victoria de la temporada, la quincuagésima segunda de su carrera en Fórmula Uno y la primera en Sao Paulo, colocándose a 12 de los 367 puntos con los que Rosberg lidera un Mundial que se decidirá en la última carrera del año, en el circuito de Yas Marina de la capital de los Emiratos Árabes Unidos, dentro de dos domingos.
Lo hizo saliendo -tras mejorar a 60 su tercera marca histórica de "poles" en F1- desde el primer puesto en la carrera más espectacular del año. En la que brilló con especial fuerza el joven holandés Max Verstappen (Red Bull), tercero en Interlagos, donde se interrumpió dos veces la carrera, con bandera roja, a causa de la lluvia, que retrasó el arranque y obligó a usar neumático extremo e intermedio.