
Jerome Valcke, por mucho tiempo la mano derecha de Joseph Blatter, fue suspendido ayer por 12 años de toda actividad relacionada con el fútbol por incurrir en conducta profesional indebida en su época como secretario general de la FIFA.
El comité de ética de la FIFA declaró culpable a Valcke de varios delitos, incluyendo utilizar jets privados para uso personal, destruir evidencia, e intentar vender por debajo de su valor real los derechos de televisión en el Caribe de los mundiales de 2018 y 2022.
“El señor Valcke actuó en contra de los mejores intereses de la FIFA, y ocasionó perjuicio económico considerable a la FIFA, mientras sus intereses privados y personales minaban su capacidad para desempeñar sus funciones adecuadamente”, señaló el comité en un comunicado.
La sanción de Valcke es cuatro años más larga que las suspensiones impuestas en diciembre al presidente Blatter y al líder de la UEFA, Michel Platini, por incurrir en conflicto de interés financiero.
Los jueces de ética dijeron que Valcke violó siete secciones del código de ética de la FIFA, comparado con cuatro que violaron Blatter y Platini.
La sanción probablemente no ponga fin a los problemas legales de Valcke. Se espera que el francés colabore con la Fiscalía de Estados Unidos y Suiza que investigan la corrupción en el fútbol.
La suspensión fue anunciada un mes después que el exfuncionario de 55 años fue despedido por segunda vez por la FIFA.