La pandemia del coronavirus, que afectó al mundo desde 2020, ha impulsado el crecimiento del comercio electrónico en varios países, y Bolivia no está al margen de este crecimiento. Sin embargo, si bien en un momento las personas realizaban sus operaciones comerciales de compra o venta de productos o servicios de manera digital, a distancia por las restricciones de la pandemia, con la reapertura de comercios y actividades, parecía que todo iba a volver a la normalidad, pero, para Marcos Pueyrredon, Presidente del eCommerce Institute y coFounder & Global Executive SVP de VTEX, el comercio electrónico llegó para quedarse y crecer.
Recordó que en estos dos años, ha cambiado todo, porque muchas personas se vieron en la necesidad de realizar sus actividades gracias a un teléfono inteligente, mediante aplicaciones comunes como WhatsApp, o las redes sociales que impulsaron la actividad comercial.
“El consumidor se empoderó de los dispositivos móviles, donde el teléfono inteligente ya es una extensión de nuestro cuerpo y que cualquier persona, con herramientas muy poderosas y sencillas como puede ser el WhatsApp, como pueden ser las redes sociales que lo incorporaron como algo habitual”, afirmó.
Desde realizar pedidos de alimentos o servicios, hasta operaciones más complejas, fueron adoptadas por las personas.
Si bien la presecialidad ha retornado, en Bolivia los comercios tuvieron que responder a las necesidades de manera acelerada y encontraron mecanismos de llegar a los consumidores.
Tomando en cuenta que con locales cerrados por la pandemia, sin clientes para ir físicamente, se motivó esta nueva forma de comercio digital.