La Fiscalía de Estados Unidos presentó cuatro pruebas en contra de Maximiliano Dávila, exjefe antidroga del gobierno del expresidente Evo Morales, acusado de presuntos vínculos con el narcotráfico.
El fiscal auxiliar del Distrito Sur de Nueva York, Sam Adelsburg, fue quien presentó las pruebas y coordinó las investigaciones con agentes de la DEA radicados en Perú, según informó el diario cruceño El Deber.
Las pruebas incluyen disposiciones legales relevantes (Prueba A), una acusación formal de reemplazo fechada el 22 de septiembre de 2020 (Prueba B), una orden de detención de la misma fecha (Prueba C) y la declaración jurada del agente especial de la DEA, Jeremy Kirk (Prueba D).
Estas pruebas documentan cómo Dávila y sus cómplices supuestamente violaron las leyes de narcóticos de Estados Unidos.
La Prueba A enumera las leyes aplicadas y las sanciones posibles, que incluyen una sentencia de diez años a cadena perpetua y una multa de hasta 10 millones de dólares.
La acusación formal detalla que, desde julio de 2019 hasta septiembre de 2020, Dávila y otros participaron en actividades delictivas relacionadas con el tráfico de drogas entre Bolivia, Perú y otros lugares.
La orden de detención (Prueba C) emitida el 22 de septiembre de 2022 y la declaración jurada del agente especial Kirk proporcionan detalles sobre cómo Dávila utilizó su posición para facilitar el envío de grandes cantidades de cocaína desde Bolivia a Estados Unidos, en colaboración con cárteles mexicanos. Kirk describe el uso de vuelos charter y la protección de estos envíos por parte de autoridades del orden público bolivianas.