El expresidente y delegado especial de Bolivia ante la comunidad internacional, Jorge Quiroga, aseguró ayer que "muy pronto" el exmandatario boliviano, Evo Morales, se convertirá en un invitado tóxico para Argentina porque al vecino país le urge retomar relaciones con otros países de la región y organismos internacionales para resolver su situación económica.
La posición de Quiroga se registra en un contexto en el que el expresidente boliviano vierte declaraciones políticas y realiza convocatorias desde ese país, donde reside desde el 12 de diciembre en calidad de refugiado político, vulnerando las normas de su estatus.
Morales es investigado por la presunta comisión de los delitos de terrorismo y sedición y cuenta con un mandamiento de aprehensión.